Élle dijo a la mujer adĂșltera: Juan 8:11 – Ella dijo: Ninguno, Señor. Entonces JesĂșs le dijo: Ni yo te condeno; vete, y no peques mĂĄs. En otras palabras le quiso decir, vete si ya yo te perdone, te limpie cierra toda puerta de adulterio en tu vida y no peques mĂĄs, apartarĂ© del pecado para que permanezcas libre y no en cautividad. Elengaño de la mujer adĂșltera (Proverbios 5:1-14) Una de las advertencias mĂĄs extensas contra el pecado sexual que involucra a una mujer promiscua se encuentra en Proverbios 5:1-14. De inmediato, advierte el texto, “los labios de la mujer inmoral destilan miel, y su boca es mĂĄs suave que el aceite” (v.3). Historia En la Biblia, el mandamiento "No cometerĂĄs adulterio", estĂĄ incluĂ­do en los Diez Mandamientos (Éxodo 20:14). De acuerdo a la ley del Viejo Testamento, Un adĂșltero debe morir: "Si un hombre comete adulterio con la mujer de otro hombre, con la mujer de su vecino, ambos el adĂșltero y la adĂșltera, deben ser condenados a muerte" CONCLUSIÓN Aunque la mujer sorprendida en adulterio era culpable de pecado y merecĂ­a la muerte, Cristo derramĂł de su misericordia sobre ella y le dio una segunda oportunidad, “ni yo te condeno”, le dijo. Usted, estimado amigo que me escucha, aunque tambiĂ©n es culpable de pecado, tiene la oportunidad de escuchar esas mismas . 303 331 354 495 90 59 350 360

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